Los sistemas constructivos se deben adecuar a la escala de la obra. Tradicionalmente el ser humano ha utilizado durante siglos sistemas basados en la experiencia adquirida por sus maestros constructores, que luego la ciencia se ha encargado de teorizar.
Actualmente, utilizar sistemas estructurales utilizados en la edad media son igualmente validos hoy en día gracias a nuestra nueva manera de ver el proceso edificatorio. Una viga de madera que sujeta piezas ceramicas, o tablas, esta en condiciones de durar más años que una estructura de vigas de hormigon y bovedillas… la ciencia lo dice. ¿Entonces que nos impide elegir el primero sobre el segundo?
De esta manera sistemas constructivos como muros de piedra, o ladrillo macizo, estructuras de vigas de madera, elementos ligeros de caña y yeso, y algunos otros son utilizables en una construcción eficiente.
Los nuevos sistemas, serían los basados en como dar más durabilidad a estos materiales, como la madera, y sobre todo en crear edificios eficientes energéticamente, es decir, aislarlos.